“Si,
estoy convencido de que esto de la marca personal es algo interesante para mi – me dijo él con
una medio sonrisa de complicidad- pero... (siempre hay un pero) ¿por dónde empezamos?
– preguntó con ímpetu- Su impulso a la acción me llevó rápidamente a devolverle
el “golpe” con otra pregunta, ¿¿Qué es importante para ti??”
Estoy
de acuerdo con la mayoría de expertos en marca personal en que ésta no es algo que se crea a partir de un momento
dado, porque hemos oído o leído sobre el tema, sino más bien es algo que decides
“descubrir” (dejar al descubierto algo que siempre había estado ahí), pero como
todo proceso, requiere seguir un patrón secuencial, poner un orden que nos
permita ver un estado de cosas coherente, con sentido… para más adelante
dotarlo de propósito.
Yo
opino que desarrollar una estrategia de
marca personal es un proceso trasversal, no es algo más que tengo que hacer, sino que es algo
que a partir de un momento dado va a
impregnar y estar presente en todos los actos de mi vida (profesional, y quizá
también personal).
Como
ya he dicho antes, el primer paso es “dejar
al descubierto” la esencia, liberados de
prejuicios, de lo que “debería” ser, de lo que los demás opinan… e ir al
centro desde el que parte todo. Por eso,
la pregunta Qué es importante para ti me parece un excelente punto de partida.
Te hace tomar conciencia de cuáles son
tus prioridades en la vida (y sin prioridades no hay ni estrategia, ni gestión del tiempo, que en
definitiva es nuestra vida, ni plan que valga). Es la piedra de toque que ha de
conectarnos con nosotros mismos, pues la
marca personal empieza dentro de cada uno de nosotros, parte de nuestra voz
interior, y podemos escucharla en voz alta para empezar a ORDENAR el torrente
de ideas, sentimientos, pensamientos, sueños y proyectos dispersos en nuestra
mente.
Dar
este primer paso a través de un procedimiento establecido, guiado por un
experto en la materia es iniciar un camino
para tomar definitivamente las riendas de nuestro desarrollo profesional
(y personal).